Seleccionar página

HISTORIA DEL CAFÉ DE QUILLABAMBA

HISTORIA

Cómo llegó el café a Quillabamba

El café es la segunda bebida más consumida en el mundo, después del agua.

El café de nuestra tierra

Quillabamba

Todo comenzó siglos atrás en África, exactamente en Etiopía, donde el café inicialmente se consumía en infusiones o masticando sus hojas, pero fueron los árabes los responsables de su expansión, primero por todo el mundo árabe llegando a Turquía en 1554. En el siglo XVII entró a Europa por el puerto de Venecia y se expandió por el continente para finalmente llegar a América hacia el siglo XVIII. Los responsables de esta expansión por nuevos continentes fueron los holandeses que no querían depender más de los árabes. Fue así como a principios del siglo XVIII Holanda lideraba la producción mundial de café.
Una de las teorías sobre cómo llegó el café a Latinoamérica es que fueron los holandeses quienes lo introdujeron por lo que hoy es Surinam y luego los franceses a principios del siglo XVIII lo llevaron a Colombia y Brasil. Para el siglo XIX se había convertido en un cultivo de gran importancia, en lo que también influyó que a mediados de ese siglo la roya del cafeto, atacó los cultivos de Ceilán, hoy Sri Lanka, quienes en aquel momento eran los principales productores de café.
Las primeras noticias sobre café de Perú hacen referencia a unas semillas llegadas al país en el año 1838, provenientes de la cuenca del Orinoco, territorios que hoy en día pertenecen a Venezuela y Colombia. No fue, sin embargo, hasta el año 1876 que su cultivo se desarrolló en forma comercial. Los primeros territorios donde se cultivó café fueron los situados en el valle de Chanchamayo en la Selva Central. Según parece, los primeros en tener cuidado de esta nueva forma de producción agrícola y comercial fueron los colonos europeos llegados a Perú unos años antes en busca de una mejor vida de la que en aquellos momentos tenían en el viejo continente.
Actualmente, de los 24 departamentos del Perú, 10 son productores de café. El cultivo se concentra básicamente en la región del Valle de Chanchamayo con cerca de un 50% de la cosecha total del país, siendo el departamento de Junín el máximo productor. El café crece también, aunque en menor cantidad, en la parte septentrional y nororiental del país.

Son 200 años de historia llenos de constantes aprendizajes, siempre poniéndole trabajo y pasión para ser hoy el mejor café suave del mundo.